Le tenía muchas, muchísimas ganas a Les Emotifs Anonymes. Quizás demasiadas. La verdad es que creo que le tenía tantas ganas que no terminé de disfrutarla. Me reí, me lo pasé muy bien viéndola, me pareció una película muy dulce; pero no sé si me ha gustado más de lo que me han gustado películas similares de otros orígenes (Estados Unidos, Reino Unido…).
Viendo Les Emotifs Anonymes llegué a la conclusión de que la timidez en Francia se ve de una forma diferente a como la veo yo, que los personajes tenían más pánico a vivir que timidez. Que sí, que entiendo que cuando un tímido establece una conexión especial con alguien se comporta de forma diferente, pero en este caso no vi tanta timidez. De todas formas, la película me ha parecido muy bonita, y la recomiendo.
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